Cuando crees que ya lo sabes todo es el mejor momento para comenzar de nuevo.
Quién es Daniel Granatta
Soy Daniel.
Mis padres fueron profesores, y nací en una pequeña ciudad de España llamada Cáceres. Si has visto Game of Thrones, Cáceres es The Citadel, y también el lugar donde Daenerys dice “DRACARYS” por primera vez. Si no has visto Game of Thrones, es un sitio que está a mitad de camino entre Madrid y Lisboa.
El hilo rector de todo lo que hago es aprender para poder enseñar, y enseñando es la forma en la que aprendo. Mi cabeza es desordenada y tengo que escribir para ordenar mis ideas. Uno no escribe para tener razón, sino para salir del lugar en el que está.
Cuando naces en España, piensas que España es el centro del universo. Siempre explico esto diciendo que la punta superior izquierda del mapa de España es un lugar llamado Finisterre (= fin del mundo), lo cual explica claramente por qué los españoles somos a menudo testarudos y cerrados de mente. No discutan con un español, nunca en la historia de España un español cambió de opinión tras una discusión. Es inútil, no discutas, hazme caso. Lo más sorprendente de La Casa de Papel es su premisa de que 8 españoles se puedan poner de acuerdo para algo.
En 2005 me mudé a México. Latinoamérica me acogió como uno de los suyos, y ahora puedo decir que soy mejor persona gracias a todos los kilómetros que he hecho. He vivido en México desde entonces (excepto un par de años en Miami) y actualmente trabajo como Director de Brand, Content y PR en Stori, una startup que busca democratizar el acceso a tarjetas de crédito en segmentos desatendidos por el mercado financiero.
Antes de eso, trabajé en startups como Platzi -ayudando a que más personas empezaran su camino en tecnología- y empleé muchos años de mi carrera intentando reinventar la forma en que se hace publicidad, trabajando para marcas como Nike, Nestlé o Rexona, e incluso ganando el primer León de Titanium&Integrated de la historia de la publicidad mexicana en el Festival Internacional de Creatividad de Cannes. Pero incluso, antes de eso, tuve un pequeño estudio de diseño con unos compañeros de universidad donde experimentábamos con todo tipo de formatos para interactuar con los usuarios de los proyectos que nos encargaban. Estudié Ingeniería y luego Antropología. Programé desde la tostadora hasta Java y C++, y tengo publicados más de 20 libros sobre Flash, ActionScript y su integración con bases de datos. En 2021, publiqué Una vida de creativo, una memoria autobiográfica en la que cuento parte de mi historia y mis experiencias personales y profesionales relacionadas con la curiosidad y la creatividad.
Estoy casado y tengo una hija de 12 años y un hijo de 3, que hacen que todos los días mi trabajo consista en construir el futuro en el que quiero que vivan.